En 1990, Richard Westerhuis e Yvonne Swaans empezaron juntos su aventura empresarial. Vieron una oportunidad. A esto le siguieron muchas horas elaborando planes y tomando decisiones. Después de este intenso período de investigación, empezaron a trabajar juntos con entusiasmo para lograr grandes éxitos.

A través de ensayo y error, han realizado muchos de sus sueños durante los últimos 30 años. Siempre trabajando desde su propia fortaleza y haciendo uso de la fuerza y perseverancia mutua. En 2020 ya disponían una oficina familiar sólida donde un excelente equipo de profesionales apasionados trabaja en la investigación y la expansión de las oportunidades empresariales siempre presentes.

Uno de los sueños de esta pareja de emprendedores es poder compartir los conocimientos, habilidades y recursos económicos que han adquirido para ayudar a crear un mejor entorno de vida. En este caso, no se centran en el éxito empresarial sino en la consecución de objetivos sociales. Objetivos que mejoran la cohesión social, y los desafíos relacionados con el clima. 

Esta idea fue el motor para crear la fundación Cirrus en 2021. Pretende apoyar y financiar proyectos existentes y poner a su disposición recursos para ayudarlos a dar el siguiente paso en su consecución, centrando en el ámbito del clima y los derechos humanos.

La elección el nombre Cirrus, un tipo de nube, define el espíritu de los fundadores y empresarios. Los cirros son tranquilos y discretos, pero en realidad se mueven a gran velocidad. Además, los cirros son nubes veladas. Presentes, pero dejan pasar la luz del sol.

La fundación Cirrus es una institución privada ubicada en los Países Bajos. No solicita dinero ni bienes a terceros.

La fundación esta nomo “Algemeen Nut Beogende Instelling” (ANBI).

El tablero consta de:

Presidente: Yvonne Swaans

Secretario: Marcel van der Veer

Tesorero: Gidi van Boxmeer